Este artículo está basado en la interpretación de la novela del norteamericano Mark Twain, publicada en el año 1876: Tom Sawyer; basada en las aventuras de un niño involucrado en la sociedad Norteamericana, pone en evidencia fenómenos como la diferencia de clases, el racismo, el liberalismo entre otros.
Se puede observar cómo algunas de las diferencias entre clases sociales se hacían evidentes en la manera en que las familias pudientes y las familias afroamericanas interactuaban dentro de una dinámica de explotación. Esta situación llevaba a los afroamericanos a cometer actos delictivos; cargados por la opresión de las clases superiores, se precipitaban a tomar venganza por cuenta propia. Se relaciona y además se fortalece este episodio con lo que se plantea en el libro primero de Utopía escrito por Tomás Moro, el cual hace referencia a la cuestión de por qué roban los ladrones.
Pues bien, si el robar es un acto influido por las acciones sociales, está muy claro que la sociedad misma concibe las circunstancias para que los individuos roben. Según Kant, la sociedad que goza de mayor libertad es aquella en la que los límites de dicha libertad estén determinados al otro. La exigencia más apremiante de la razón es esclarecer qué es la libertad humana, cómo funciona y cuáles son sus objetivos e intereses, pues se trata de conseguir una liberación real y efectiva, no meramente subjetiva y pensada. Como también John locke en su filosofía política en la doctrina de la propiedad y la libertad, hace apreciación sobre esta premisa dictando: Se trata de tener el poder de ejecutar la Ley para que la Ley sea eficaz hay que proteger al inocente y reprimir a los delincuentes.
Cuando hablamos de límites reprimimos y contenemos nuestros propios deseos, evitando actuar de manera precipitada, sin meditar en las consecuencias que este tipo de comportamientos podría acarrear. Nos rigen leyes sociales, las cuales determinan si nuestros actos son buenos o malos; además de unas leyes espirituales inscritas en el código bíblico, según el cual, el que obra justamente todo le saldrá bien y tendrá una buena recompensa aquí en la tierra y además en la vida eterna, por ende, el que mal obra todos sus caminos irán en desgracia y quedaran avergonzados delante de los hombres. Al mismo tiempo, retomamos a Aristóteles, el cual considera una acción buena aquella que conduce al logro del bien del hombre; por lo tanto, toda acción que se oponga a ello será mala.
Un ejemplo de esta ley, es el caso del mulato JOE en la obra ya mencionada Tom sawyer, quien actuó muy mal cometiendo homicidio y robando. Como consecuencia tuvo un final cruel, aislado de la sociedad. Santo Tomás de Aquino propone que la justicia exige que el mal moral sea castigado y postula que el castigo existe no por si mismo sino para que el orden de la justicia sea preservado.
Me Gusta!!! :)
ResponderEliminarmuy bueno...
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